Sobre las Elecciones Municipales
El Movimiento de Afirmación Social (MAS) y Patria Roja no participan en el proceso electoral municipal limeño. Decidieron apartarse de las “negociaciones” de la llamada Coalición Democrática que postula a Susana Villarán; no tanto por simpatías o antipatías a la candidata, sino porque “las tratativas” que buscaban la unidad, una alternativa, un proyecto municipal y una adecuada y legítima representación, fueron un fiasco. Primaron viejos vicios del electorerismo tradicional y nuevos vicios añadidos a raudales por gentes y grupos que hicieron caricatura cruel de las prédicas de “modernismo” y “superación” con las que nacieron o buscaron renacer en la vida política.
En realidad, fueron el pragmatismo y el utilitarismo más groseros los que presidieron todas las conversaciones y negociaciones, donde estuvo casi siempre ausente la discusión unitaria o programática, la necesidad de un proyecto como parte de un proceso de acumulación democrática para seguir avanzando. La obsesión era ganar. No importa cómo, no importa con quién, no importa para qué. “Salvo el triunfo municipal”, todo es ilusión, podía sintetizarse.
En este estado de cosas, obviamente, florecen los oportunismos, la falta a los acuerdos y compromisos, el irrespeto a las bases, el olvido de los principios, el autoritarismo y el mandonismo, las decisiones individuales y cupulares.
No se buscaban aliados para un frente electoral, se buscaban solo acompañantes, para que otros decidieran.
Por ello, nos parece mejor apartarnos de todo este juego, con la seguridad de que mejores tiempos de unidad tendrán que llegar con nuestros esfuerzos.
